Acompañar y potenciar el crecimiento
Es frecuente en la consulta de PyMEs la falta de certezas sobre la buena salud de la empresa, aún con indicadores que en principio muestran estabilidad o crecimiento.
Se presenta mucho la sensación de estar trabajando bien pero sin referencias sobre el rendimiento del negocio. ¿Estoy ganando plata? La autorespuesta inmediata es ‘sí’, el negocio sigue abriendo, estamos facturando, tenemos más clientes y mi situación económica personal ha mejorado en el último tiempo. Sin embargo, hay algo que no cierra.
Si bien cada caso es particular, es normal que a partir del crecimiento de un proyecto el volumen de trabajo y de procesos a realizar se incremente. También hay otras causas que conducen a cuellos de botella: las horas dedicadas a dichos procesos siguen siendo las mismas o quienes los ejecutan están sub-calificados para hacerlo, por ejemplo.
Este último punto cobra mayor relevancia, ya que en general muchas tareas son realizadas por los socios y los primeros colaboradores, complementándose entre sí y supliendo con esfuerzo el conocimiento específico que tienen. Al mismo tiempo, vemos que alcanzado un momento en la evolución de la empresa ya deja de ser un problema cuantitativo (horas de trabajo) sino cualitativo (habilidades específicas). Es aquí donde aparecen las sensaciones de que se escapan cosas, se pierden negocios, no se ve la ganancia.
Todo bien hasta acá, comprendido el asunto. Pero ¿Cómo podemos darle la vuelta? Tranquilos, que ya dimos el primer paso y el más importante: darnos cuenta. También hicimos referencia a la falta de tiempo y disponibilidad de recursos, parece un callejón sin salida. Vamos por acá:
- Después de muchas reuniones de equipo planteando ‘tenemos un problema que no solucionamos’, es un buen momento para pensar en una consulta externa.
- El staff de apoyo -especialistas, consultores- debe ayudarnos a reconocer las causas y la salida de los problemas en sus puntos críticos
- Usar el tiempo de reunión del equipo PyME para abordar las soluciones propuestas
- Aplicar y analizar los cambios con el acompañamiento de la consultoría especializada
- Disfrutar el crecimiento obtenido
Es frecuente que haciendo pocos cambios en actividades que se han vuelto críticas para el giro del negocio (como la gestión financiera y operativa de compras y pagos, por ejemplo) se ven rápido resultados positivos, que más que compensan la inversión en realizarlos.
Parece fácil, pero no siempre lo es. Lo que sí, es altamente productivo. Y es que en el inicio del proceso hay inversión de tiempo, pero esta vez puesto en la resolución: redeterminación de tareas y responsabilidades, inclusión de procesos que hagan más eficiente la gestión, agregado de valor en lugares específicos del negocio donde el equipo actual puede potenciarse.
Todo negocio que crece se va transformando en el camino y exige nuevas y mejores soluciones que deben ser acompañadas por los empresarios. El mejor indicador de crecimiento para ellos es la capacidad de encontrar soluciones nuevas para seguir creciendo.