De qué se trata y qué podemos hacer hoy
Mucho se escucha hoy en día sobre cuidado del medio ambiente, cadenas de producción sustentables y economía circular, como conceptos vinculados al mismo tiempo a las buenas intenciones y a lo difícil de ser llevado a cabo. Pero, ¿de qué se trata todo esto?
Cualquiera que haya estado en alguna planta de producción podría detectar con facilidad manejos de residuos, scrap o packaging (por poner sólo algunos ejemplos) de manera ineficiente o subóptima, dando cuenta que hay mucho por mejorar en este sentido. ¿Por dónde comenzar? Por informarse y asesorarse para asumir que es un problema real y que podemos hacer cosas para cambiar la situación. Para ello pueden consultar a nuestras partners de CR|Consultora en Sustentabilidad.
Las tendencias del presente
La industria del reciclado, por caso, está mostrando un crecimiento sostenido en el mundo, reflejando una tendencia a tener mayor influencia en los procesos productivos y en la generación de valor en el agregado de la economía. También vale la pena destacar que es uno de los sectores, el del reciclado en particular y los que tienen que ver con la sustentabilidad medioambiental en general, puestos en valor fuertemente por los gobiernos de los países centrales -sobre todo a partir de la irrupción de la pandemia- y también del estado argentino.
Las empresas que funcionan con el foco puesto en la economía circular buscan crear capital económico, natural y social. Están guiadas por tres principios fundamentales: eliminar residuos y contaminación desde el diseño, regenerar sistemas naturales y mantener productos y materiales de uso.
Beneficios de ‘hacer algo’ virtuoso con los residuos:
- Mejora en los reportes de sustentabilidad
- Acceso a beneficios impositivos
- Acceso a nuevos contratos
La economía circular busca revertir el ciclo industrial clásico de ‘extraer, usar y tirar’ en donde convergen 3 tendencias interrelacionadas: altas tasas de extracción de materias primas vírgenes, alto nivel de stockeo y bajos niveles de procesamiento y reciclados de materiales.
Los desafíos
El cambio progresivo hacia prácticas empresariales más saludables empieza por el comienzo: el diseño como motor de reducción de contaminación y eliminación de los residuos. La manera de encarar este proceso varía según el tamaño de la empresa, el sector de actividad, su entorno y otras variables que le condicionan en parte el margen de acción. Sin embargo, es clave incorporar el concepto de ‘siempre se puede hacer algo’ para mejorar, poniendo el foco de manera creativa en todo lo largo de la cadena productiva: desde los proveedores de insumos y servicios hasta el consumo final de los bienes.
En Fundar contamos con ejemplos de proyectos que desarrollan su modelo de negocios en base a los principios de la economía circular, como Nazca objetos, que no sólo genera conciencia sobre el tipo de productos que utilizamos en nuestro día a día sino que también desarrolla productos de excelente calidad, que permiten traspasar algunas de las barreras culturales que obstaculizan el consumo de estos productos. Adaptar las tendencias globales a los desafíos locales es el reto hacia adelante para una comunidad de negocios que tenga por objetivo hacer del entorno en el que actúan un lugar mejor.